EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO X - Del tercer socorro de la voluntad humana


El tercer socorro con que se ha de ayudar nuestra voluntad, es la frecuente oración, a la cual te has de acostumbrar de tal suerte, que cuando te hallares asaltada, recurras siempre y sin dilación a Dios, diciendo: Deus in adjutorium meum intende: Domine, ad adjuvandum me festina: Atended, Señor, a la necesidad que tengo de socorro, y dadme ayuda sin dilación (Psalm. LXIX).

Has de entrar, pues, en el combate, acompañada de la oración y de la resistencia en presencia de tu Dios, y siempre vestida de la desconfianza de ti misma, y de la confianza en su divina Majestad; que si con este aparato y de este modo combates, tendrás siempre segura la victoria.

¿Qué cosas no sobrepuja y vence la oración? ¿Qué dificultades y peligros no rinde y avasalla la resistencia unida con la desconfianza propia, y la confianza en Dios?

Y ¿en qué batalla puede ser vencido quien combate en presencia de su Dios con ánimo y deseo de agradarle?

SIGUE...
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XII - De qué modo ha de habituarse el hombre para tener presente a Dios todas las veces que quiera


Para que alcances la costumbre de tener a Dios presente todas las veces que quieras, procura pensar siempre que Dios te mira, y considera tus obras y pensamientos; o que todas las criaturas que ves son otras tantas celosías por donde te mira Dios, escondido, y te dice: "Pedid, y recibiréis, porque al que pide se da lo que necesita, y al que llama se le abre la puerta (Matth. VI)."

Además de esto, podrán hacerte presente a Dios, mirando las criaturas; en las cuales, dejando lo corporal, te has de ir luego con el pensamiento a Dios, considerando cómo su divina Majestad es quien les da el ser, la vida, el movimiento, la virtud y las operaciones.

Siempre, pues, que combatiendo, o haciendo alguna cosa, quisieres orar, represéntate a Dios en cualquiera de estas dos maneras. Después ora, y pídele ayuda y socorro.

Y sabe, oh alma devota, que si llegares a hacerte familiar la presencia de Dios, alcanzarás grandes victorias, y ganarás tesoros infinitos, y entre otros bienes te guardarás de muchos pensamientos, palabras y obras, indignos de la presencia de Dios, y no conformes con la vida de su santísimo Hijo Jesucristo.

Ten también por cierto que esta presencia de Dios te infundirá y dará virtud, para que puedas estar como debes en su presencia.

Porque si de la presencia y vecindad de los agentes naturales, que son de virtud limitada y finita, contraemos y tomamos su calidad y virtud, ¿qué diremos de la presencia y vecindad de Dios, que es de virtud infinita y sumamente comunicable?

Además del sobredicho modo de orar: Atended, Señor, a la necesidad que tengo de socorro, y dadme ayuda sin dilación (Psalm. LXIX), de que podemos usar en cualquiera necesidad, podrás orar también de otros modos más particulares, como si desearas conocer y ejecutar la voluntad de Dios, la oración que has de hacer es una de las siguientes: "Bendito sois, Dios mío; enseñadme a ejecutar vuestros preceptos: guiadme por la senda de vuestros mandamientos. Ojalá que todos mis pasos se enderecen a guardar vuestras justas y santas leyes (Psalm. CXVIII)."

Y para pedir a Dios cuanto se le puede pedir, y su divina Majestad gusta que se le pida, puedes usar la oración del Pater noster (Matth. VI), la cual deberás decir con toda la atención posible, y con todo el afecto de tu corazón, para que así alcances lo que pides.

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XIII - De algunos avisos acerca de la oración


Lo primero has de advertir que las oraciones (no hablo aquí de las meditaciones, de que hablaré más abajo) no sólo deben ser breves según quedan expuestas, más también frecuentes, llenas de deseo, y de fe actual y confianza de que Dios te ha de socorrer y ayudar, si no en el modo que deseas, y cuando tú quieres, pero sí con mejor socorro, y en tiempo más oportuno.

Lo segundo, han de ir siempre acompañadas, o actual o virtualmente, con alguna de las cláusulas siguientes:

Según tus promesas: A tu honra: En nombre de tu amantísimo Hijo: En virtud de tu pasión: En nombre de María Virgen, tu Hija, tu Esposa y tu Madre.

Lo tercero, que algunas veces añadas algunas jaculatorias como: "Concédeme, Señor, tu amor en nombre de tu amantísimo Hijo." Y ¿cuándo, gozaré yo de tal ventura?

Lo mismo se puede hacer también en cada una de las peticiones de la oración del Padre nuestro, como: "Padre nuestro, que estás en los cielos, santificado sea tu nombre (Matth. VI)." Mas ¿cuándo será el día, Padre nuestro celestial, que vuestro nombre sea conocido por toda la redondez del mundo, honrado, glorificado y ensalzado? ¿Cuándo, Dios mío, cuándo? Y de este modo en las demás peticiones.

Lo cuarto, que pidiendo en la oración virtudes y gracias, será bien considerar el valor y precio de las virtudes y tu necesidad, la grandeza de Dios, y su infinita bondad, la pequeñez de quien pide (que de esta manera se pedirá con más afecto y deseo, con más reverencia y confianza, y con más humildad), y finalmente se ha de considerar el fin de lo que se pide, que ha de ser para agradar y honrar a Dios.

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XIV - De otro modo de orar


Puedes orar también perfectísimamente, poniéndote en la presencia de Dios con el pensamiento, sin decir cosa alguna, ya enviándole de cuando en cuando suspiros amorosos, ya volviéndole los ojos, y manifestándole tu corazón con un breve y encendido deseo de que te socorra, para que lo ames, honres y reverencies, como es justo y debido; o también con un deseo de que te otorgue la gracia que le tienes pedida en la oración precedente.

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XV - Del cuarto socorro de la voluntad humana


El cuarto socorro de la voluntad humana es el amor divino, el cual de tal manera la fortalece que no hay cosa que con él no pueda, ni pasión o tentación que no venza.

El modo de conseguirlo es, primero, la oración, pidiéndoselo a Dios muy a menudo; y segundo, la meditación, ponderando aquellos puntos que son a propósito con la gracia de Dios, para encender este divino amor en nuestro corazón. Estos son:

Quien es Dios; cuánto y cuál es su infinito poder, su sabiduría, bondad y belleza. Qué ha hecho Dios por el hombre, y qué más hiciera, si fuese necesario; la voluntad con que lo ha hecho, que cosas hace cada día por el hombre, las recompensas que le tiene aparejadas en la otra vida, si mientras vive en ésta cumple sus preceptos por agradarle, y sirve con pureza de alma.

SIGUE...
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XVI - De la meditación del ser de Dios

Qué cosa sea Dios, el mismo Dios, que se conoce perfectamente a sí mismo, nos lo declaró, cuando dijo: Yo soy el que soy (Exod. III).

Es tal y tan grande este predicado de Dios, que a ninguna criatura puede atribuirse: no a príncipes, no a reyes, no a emperadores, no a los Ángeles mismos, ni al universo entero; porque todas las cosas tienen su ser dependiente de Dios, y de sí no son sino la misma nada.

De aquí se reconoce cuán vano es el hombre que ama las criaturas no amando en ellas al Creador, o no amándolas ordenadamente.

Digo vano, porque ama la vanidad: vano, porque piensa satisfacerse de aquellas cosas que de sí son nada: vano en fin, porque se fatiga por tener aquellas cosas que de suyo son caducas y perecederas. Si quieres, pues, amar como conviene amar, ama a Dios, que llena y satisface enteramente nuestro corazón.

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XVII - De la meditación del poder de Dios


Ya se sabe que no sólo esta aquella potencia del mundo, sino aun todas juntas y unidas, queriendo edificar, no reinos, ni ciudades, sino un solo palacio, necesitan de varios materiales, instrumentos y maestros, y de mucho espacio de tiempo; y con todo esto, por grande que sea la diligencia, no se acaba el edificio a su voluntad y gusto; mas Dios, con solo su poder y querer, en un momento creó de la nada todo el universo mundo, y con la misma facilidad podría crear infinitos mundos, destruirlos y reducirlos al no ser.

Este solo punto, si profundamente se medita, despertará en nosotros nuevas maravillas y nuevos incentivos para amar a un Dios y Señor tan sumamente poderoso.

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XVIII - De la meditación de la sabiduría de Dios


Cuán alta e inescrutable sea la sabiduría de Dios, no hay quien lo pueda decir ni comprender; pero para que conozcas algo de ella, vuelve los ojos al ornamento de los cielos, a la hermosura de la tierra y de todo el universo, y no hallarás otra cosa que la incomprensible sabiduría del Artífice divino.

Vuelve la mente a la vida de los hombres, a los varios accidentes que ocurren, y hallarás que no hay cosa tan desordenada que respecto de Dios no sea suma sabiduría.

Medita los misterios de la redención, y los hallarás todos llenos de esta altísima sabiduría, y dirás a menudo con san Pablo, absorto en este piélago inmenso: "¡Oh inefable y altísima grandeza de los tesoros de la ciencia y sabiduría de Dios, Cuán incomprensibles son sus juicios, e investigables los caminos de sus secretos!" (Rom. XI, 33).

SIGUE...
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XIX - De la meditación de la bondad de Dios


Como todas las demás infinitas perfecciones suyas, la bondad de Dios es incomprensible en sí misma; pero si miramos lo que por de fuera se dilata y extiende, es tal y tan grande, que no hay cosa en el mundo en que no resplandezca.

La creación es efecto de la bondad de Dios: la conservación y gobierno de las criaturas es también efecto de la bondad de Dios: la redención nos muestra que es inefable e infinita la bondad de Dios pues nos dio su propio Hijo para nuestro rescate, y nos lo da también por sustento cotidiano en el admirable Sacramento del altar. (*Nota de Javier: hoy tenemos a nuestra disposición la bendita y providencial Comunión Espiritual, disponible a cada momento, ¡así que aprovechemos bien este maravilloso auxilio divino!)

SIGUE...
Image
Avatar de l’utilisateur
InHocSignoVinces
Messages : 2999
Inscription : dim. 26 août 2018 11:43
Localisation : Tharsis, Hispania

Re: EL COMBATE ESPIRITUAL (P. Lorenzo Scúpoli)

Message par InHocSignoVinces »

CAPÍTULO XX - De la meditación de la belleza de Dios


De la belleza de Dios, basta que sepamos todos que es tal y tan grande, que contemplándose en ella el mismo Dios, ab aeterno, se halla, en su capacidad infinita incomprensiblemente satisfecho y bienaventurado.

¡Oh hombre, conoce la altísima dignidad a que eres llamado por Dios, que es para gozar de esta su incomparable belleza! No seas de corazón tan duro y tan pesado, que despreciando sus infinitas perfecciones, pongas tu afición en la vanidad, en las mentiras y en las sombras. Dios te llama al amor de su poder, sabiduría y bondad: te llama al goce de su belleza, y de los incomparables bienes que tiene preparados en el cielo; ¿y tú te haces sordo? Piensa, piensa seriamente en tus cosas; porque llegará tiempo en que no aprovechará el arrepentimiento.

SIGUE...
Image
Répondre

Revenir à « Textos en español »

Qui est en ligne ?

Utilisateurs parcourant ce forum : Aucun utilisateur inscrit et 4 invités